lunes, 26 de marzo de 2007

¿LO QUE EL OTRO QUIERE?




Frente a un poema, solemos escuchar pedidos de explicaciones, sostenidos por la pregunta fatal: “¿Qué quiso decir el autor?”. Como si sólo se tratase de curiosear acerca de lo que el otro quiere.
Pero ya se sabe (¿se sabe?) que en arte, lo hecho, hecho está.
¿Explicar un Rimbaud, un Celan, un Vallejo? ¿Explicar una Adrianne Rich, Pizarnik, Lispector? (Y tantos otros...) Para no hablar de la poesía en cine, pintura, música, escultura...
¿Explicar? Así como en geometría, las líneas asintóticas se acercan infinitamente a una curva sin tocarla jamás, así el lenguaje tropieza con sus límites para dar cuenta de lo inasible. Lo que nos abisma no se deja atrapar por el torpe juego de vocal y consonante, en su función comunicacional. Poesía mediante, sólo podemos acecharlo.
Desordenemos nuestras células y cantemos. Lo que resiste, expulsado por la corrección, nos interpela corporalmente.

Liliana Piñeiro.

EL MONSTRUO SIEMBRA

Cámera
Aprenderás tal vez a vivir como el lobo vive, al acecho del hombre:
sea tuyo el cristal del espejo...” (1)
1

15 páginas de Heidegger sobre Zaratustra
En Virus dos mujeres corriendo un pasillo de tantos
nave bote castillo
maternidad matrimonio
el monstruo siembra propaga robotiza
sofisticado
artefacto tecnológico.

Urdimbre.

Ella quiso que el lobo la comiera
pero se quedó quieto mirando mirando.

¿Qué presentimiento de luna mutante
huele su hocico?
¿Que lo detiene en los bordes del sendero?

Espera.
Dentro de ella algo ha muerto
algo se descompone con un ruido
de papel apretado
pero no es tiempo aún
la mirada del lobo se silencia
sustancia de sí que orbita ese miedo.
(ver el poema completo)
Lilián Cámera

lunes, 12 de marzo de 2007

GOCE (SANTA TERESA)


Como deseo de Tí te posas acariciando mis devociones
siento todo mi cuerpo cargando la cruz de tu sexo
Mientras cruzo las piernas
faldas largas ocultas
aprieto contra mí misma y allí te siento
Quiero verte gozando frente a mi goce encubierto
Las espinas de tus ojos quietos
penetrando mis huecos
Soy como lluvia silenciosa se deja llevar por tu viento.
Sé que tienes un eterno secreto que disfrutas mirando
cuando la cruz de tu rostro llega hasta mí.
Sé que mis senos te absorbes
mi alma desnutres al verme gozarte.
Sé de tus manos encadenadas sutiles a la tentación.
Sé de tu deseo
y con rosario culposo puedo en velo de rezo sobarte.

Vanesa Aldunate

PAUL CELAN: EXCAVAR BAJO LA CORTEZA


¿Era imposible la poesía después de Auschwitz?. Paul Celan desmiente a Theodor Adorno en el idioma de los asesinos. En un único movimiento, el poeta soporta un “cuerpo a cuerpo” con la lengua alemana y la redime, posibilitando que “la escritura poética advenga, es decir, sea un acontecimiento que la marque” (Derrida).
En “Fuga de muerte”, su poema más conocido, voces en contrapunto dan cuenta del poder del verdugo y la degradación de sus semejantes. El cabello de sus mujeres es metáfora de tragedia. Con música de violines la masacre es refinada: la mayor espiritualidad acompaña la mayor atrocidad.
A partir de aquí, el poeta firma como testigo de una generación espantada, que guarda en su retina los cadáveres apilados frente a los hornos, el humo de un fuego innombrable. Las cenizas son rastro y escritura.

Liliana Piñeiro