Parque Avellaneda. Espacio de huertas coloquiales. Cascada de barrio cotidiano. Especies autóctonas. Bonsáis en extinción. Resguardo de tren y albedrío entre juncos, potrero y solarium.
El alma antigua junto a la creación. Junto a la proyección y carrera,
natación y mármol: Fresco recreo de verano. Caminata de dieta, atardecer plagado de sol. Infancia de trenes y migas en el pasto. Calesita y tobogán, con sortija de padres estrenándose.
Melancolía del tiempo: hoy te vistes de colores, tan nuestro como antes tu sonido ha cambiado. El idioma desdibuja la fotografía de antaño. Y en el potrero de mi barrio la pelota se esconde en las raíces de ayer. Música del altiplano. El aroma del laurel embriagado de sopas y alcoholes. La calle oscura y terruna.
Extraño la soledad de tus rincones. Por las migas de mi pan, por los boletos del señor de peluca que asustaba niños al regalarles la sortija.
El regazo de tardes ya no aporta tranquilidad.
El alma antigua junto a la creación. Junto a la proyección y carrera,
natación y mármol: Fresco recreo de verano. Caminata de dieta, atardecer plagado de sol. Infancia de trenes y migas en el pasto. Calesita y tobogán, con sortija de padres estrenándose.
Melancolía del tiempo: hoy te vistes de colores, tan nuestro como antes tu sonido ha cambiado. El idioma desdibuja la fotografía de antaño. Y en el potrero de mi barrio la pelota se esconde en las raíces de ayer. Música del altiplano. El aroma del laurel embriagado de sopas y alcoholes. La calle oscura y terruna.
Extraño la soledad de tus rincones. Por las migas de mi pan, por los boletos del señor de peluca que asustaba niños al regalarles la sortija.
El regazo de tardes ya no aporta tranquilidad.
¿Tendré que buscarte en las mañanas para que me regales pasto renovado de rocío?
©Vanesa Aldunate
23 comentarios:
Ayer y hoy. El alma antigua y la música del altiplano. Una fotografía que se desvanece y otra que se ilumina en el amanecer del recuerdo.
Excelente texto, Vanesa. Felicitaciones.
Dejando migas de pan, de algún modo has recuperado el paraíso.
Y yo he paseado por él contigo.Besos***
Sencillamente melancólico y hermoso.
Un saludo.
entiendo estos dolores cuando nuestros espacios cambia o acaso seamos nosotroas las que ya no los sentimos igual
me ha encantado tu parque, tengo uno parecido..en la memoria
un besp
Me llevaste de cabeza con tus palabras a ese hermoso parque...mi cuarto huele ahora a hierbabuena y romero...
gracias!
un beso grande
Hanna; es increíble como el pasado puede fundirse con el hoy y llevarnos así a los lugares de siempre a la vez desconocidos.
Muchas gracias
Vanesa Aldunate
Dalia: esas migas en el pasto seguda de la hilera de hormigas que comían de mi pan... es la comunidad de mi parque.
Gracias por tus palabras tiernas
Saludos
Vanesa Aldunate
Pato: gracias... un placer encontrar un comentario tuyo.
Mi cariño
Vanesa Aldunate
Gata insomne: A no dejarlo caer, te ayudo, atemos ese recuerdo para que si cambia siempre podamos regresar.
Inmensos saludos
Vanesa Aldunate
Roberto; que gratas son tus palabras!!! me alegro que lo hayas olido. No olvides el eucaliptus y el laurel
Besos
Vanesa Aldunate
I believed, I believe in you ...
beautiful words, congratulations!
a kiss
Louise
Cada lugar de la ciudad va conformando el cuerpo que somos, que cada uno es. Buenos Aires, -glosando a Mandesltam-, aún tienes mis números de teléfono.
Y esa pregunta que vuelve:
¿Puedo llamar o han cambiado el número telefónico de mi pasado?
nos apegamos a los parques, a los rincones de nuestra ciudad, a las esquinas, son momentos en qué aparece toda la nostalgia, porque las geografías y las voces cambian, se renueva un ciclo: otros recordarán a esta música del altiplano, a estos aromas de sopa y alcoholes
con igual memoria de un tiempo perdido
un beso
Marina
Louise M. Thank you, thank you.
a kiss
Vanesa Aldunate
J.G.:Cada lugar, mínimo espacio que la mente recorre, exista o no realmente.
Cada palabra que conforme el futuro y nos modifique ha de cambiar nuestro número telefónico momentáneo. Pero siempre hay uno al cual recurrir… aquel conformado por nuestra esencia.
Un abrazo
Vanesa Aldunate
Marina: Es un sino, debemos perdernos en algún olor, recuerdo o sonido. Es esa nostalgia que debemos sentir para poder valorar.
Un saludo
Vanesa Aldunate
Vanesa:
hermoso y nostalgico y claro arboles de mi ninez. Claro que yo tiraba mas por Flores, le deje un comentario de una curiosidad terrible de este Parque Avellaneda en mi blog en el post anterior
Saludos
Mary Poppins: curiosidades del Olimpo. Flores también tiene su encanto. Gracias por ambos comentarios.
Increíble y paradójicamente nos acerca la distancia. Un gran abrazo.
Vanesa Aldunate
Los arboles, son como una mescla entre el cielo y la tierra, argumentando millones de años...
no creo que exista nada mas respetable
los recuerdos buscando sus imágenes, sus sabores, sus aromas para mostrarselas de nuevo al corazón.
besos.
Coronel Almodiga Batista: Así es. Ellos poseen el don de estar tan cerca del cielo y al mismo tiempo arraigados a nuestras cenizas.
Un saludo. Nos estamos visitando
Vanesa Aldunate
El corazón que por momentos siente haber perdido, pero que se reconcilia con el tiempo para recobrar.
Gracias
Vanesa Aldunate
las palabras pueden ir sacando velos,
retirando cáscaras
hasta encontrar ese lugar debajo del lugar
bello desandar el de tus palabras
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